Elba Esther Gordillo, el mensaje

Por J. Enrique Olivera Arce


El nivel de degradación ética y moral de la política en México lo ha puesto de manifiesto la Sra. Elba Esther Gordillo, con sus confidencias sobre el apoyo otorgado por el SNTE al entonces candidato a la presidencia de la República, Felipe Calderón Hinojosa, a cambio de posiciones político administrativas para su familia y allegados una vez alcanzado el triunfo del panista.

Sin el menor rubor declara utilizar al mayor gremio sindical de América Latina, como moneda de cambio, reflejando con ello el extremo a que ha llegado la descomposición de la sociedad en México, dejando la educación pública básica en manos de siniestros mercaderes de pulgas.

Pero también no deja de reflejar el menosprecio que para la Sra. Gordillo merece el poder presidencial, ahora en manos de Calderón Hinojosa, cuando conciente de la debilidad del michoacano en los estertores de su mandato, con sus declaraciones da por terminado el compromiso con éste, a la par que emite el mensaje: Libre del compromiso adquirido con Calderón, hoy ofrezco al mejor postor el apoyo de la organización sindical al candidato presidencial que más ofrezca, lo mismo sea del PRI, del PAN, del PRD, ó del “otro señor” que me despreció en el 2006. Las confidencias de Elba Esther Gordillo no pueden interpretarse de otra manera.

Para rematar, rompe con Miguel Ángel Yunes Linares, exigiendo una auditoría a Fondo en el ISSSTE, como pago a la traición del político veracruzano que se atreviera a negociar por su cuenta y a sus espaldas, con Calderón Hinojosa. Como si la dirigente vitalicia del SNTE tuviera la calidad moral y política para exigir cuentas claras, cuando históricamente la camarilla dirigente que preside de por vida, no ha dado cuenta del manejo de las cuotas sindicales de más de millón y medio de agremiados.

Rompimiento que ya tiene sus efectos en Veracruz, reviviéndose el “odio jarocho” que anima al priísmo veracruzano en contra del oriundo de Soledad del Doblado. Orquestándose la continuidad de la “guerra sucia” que prevaleciera a lo largo de la elección del 2010, para impedir que el PAN pudiera nominar a Yunes Linares como candidato a una senaduría. “Los perros de la guerra” ya están sueltos”.

El futuro político de Miguel Ángel, llegó a su fin, se dice en una bien coordinada campaña mediática, gracias a que ha sido repudiado y condenado al cadalso por Elba Esther Gordillo. Esto aún antes de confirmarse si Calderón atenderá la demanda de auditar al ISSSTE y, en su caso, fincarle responsabilidades al ex director del organismo. La Sra. puede más, aún después de romper con quien fuera su mejor  y único postor, haciendo de Yunes Linares objeto desechable pese a lo que piense el presidente.

Calderón es historia pasada para Elba Esther Gordillo, lo da a entender en su oportuna confidencia. Lo que cuenta es lo que viene.

Escenario en el que quien queda mal parada es la sociedad en su conjunto, a la que se menosprecia, dejándole sujeta a los designios del corporativismo magisterial. Los votantes no cuentan, los votos menos. Las urnas son mal necesario para taparle el ojo al macho, cuando las decisiones fundamentales se toman en el tianguis político, sometidas al libre juego de la oferta y la demanda. ¿Quién da más? El límite de la puja lo pone la corrupción e impunidad lastrante.

Fenómeno que no es privativo del SNTE, sino del corporativismo sindical en su totalidad. El trabajador mexicano, idealizado en paradigmático mural revolucionario de Diego Rivera, secuestrado en su esencia es hoy mercancía política que va de mano en mano como objeto inanimado.

El apoyo gremial a los candidatos, antes, durante y ex post a una elección se otorga al mejor postor. El estado de derecho, la Constitución general de la República y las leyes que de ella emanan, así como la voluntad popular en que se sustenta la democracia representativa, son pecata minuta. El charrismo sindical, hoy y antaño, tiene la última palabra.

Y aún hay más. Conociendo como opera el mapachismo sindical, las confidencias de la Sra. Gordillo, ya del dominio público, confirman en el terreno de lo objetivo, lo que anida en el imaginario social: Felipe Calderón Hinojosa asumió la presidencia de la República como resultado del fraude maquinado por Vicente Fox, en alianza con los poderosos sindicatos de éste país. Lo que hoy, sin el menor escrúpulo pone en evidencia la dirigente vitalicia del magisterio.

Frente a esto, mañana domingo en la elección de gobernadores en el Estado de México, Nayarit y Coahuila, ¿cuál será la actitud del electorado, tras la lectura del mensaje emitido por la Sra. Elba Esther?

Formulada esta pregunta a algunos amigos que dicen saber del paño, la respuesta es contundente: “a los votantes les vale, la suerte ya está echada a favor de Enrique Peña Nieto en el 2012 y ello asegura para el PRI el resultado de las elecciones en esas entidades federativas”.

Si esto es así, queda en el aire la interrogante: ¿El PRI y Peña Nieto ya tomaron nota del mensaje y en la puja están ofreciendo más que sus adversarios potenciales?

¡Qué bonito país de cínicos, decadente y surrealista!

Esto es lo que tenemos y esto es lo que merecemos, cuando hemos dejado perder lo mejor de nosotros mismos.